Esta localidad vallisoletana es uno de los mejores destinos para una escapada rural.tierra de viñedos y castillos, es sinónimo de buen comer y beber. Es el caso del restaurante, enoteca y wine bar Ágora de Protos, enclavado en el edificio que albergó, en 1927, la primera bodega de Protos de la región. Un espacio gastronómico que aúna tradición y vanguardia y cuya terraza ofrece unas vistas espectaculares del castillo de Peñafiel. Aquí puedes encontrar el vino perfecto para maridar unas migas con chorizo, o cualquier otro plato castellano. ¿Nuestra recomendación? El crianza de Bodegas Protos, un caldo envolvente, sabroso y equilibrado que ha de servirse a una temperatura de entre 15 y 16 grados y que, en boca y nariz, recuerda a la fruta madura. Otras paradas indispensables al visitar Peñafiel son la Torre del Reloj, el Parque de la Judería y el Convento de Las Claras.