AMartina Jáudenes siempre le ha gustado cuidarse y, aunque lo hace en el día a día, no por ello se priva de algún que otro capricho, especialmente en la cocina. Madre de dos niños y a punto de lanzar una nueva línea infantil dentro de su marca de belleza, Mumdose, la empresaria se entrega de vez en cuando a sus platos favoritos... y no son los más ligeros precisamente. -¿Qué te gusta más, comer o cocinar?

-Me gusta más comer que cocinar, pero, aunque en mi día a día no suelo tener tiempo, los fines de semana sí solemos hacer plan en la cocina y lo disfruto muchísimo. Nos repartimos las tareas y pasamos un rato divertido en familia. Mi hijo mayor ayuda a lavar las verduras, a mezclar ingredientes o incluso a planificar el menú.

-¿Tienes alguna anécdota de infancia relacionada con la cocina?

-Sí, una vez estaba haciendo un bizcocho en casa y, al preparar los ingredientes, confundí el azúcar con la sal... ¡ya te puedes imaginar el resultado! A partir de ese momento, aparte de probar siempre antes de agregar el ingrediente, también me quedé con la idea de que el azúcar brilla y la sal no.

-¿Cuál dirías que ha sido la experiencia gastronómica más memorable de tu vida?

-¡Muchas! Por resaltar alguna no muy lejana, cenar en un japonés mientras hacían el ronqueo del atún. Lo hacen en Hotaru, Madrid, y es un planazo.

-¿Cuáles son tus platos estrella?

-Mi plato estrella es la carbonara, sin duda. ¡Se trata de un plato superfácil de hacer y nos encanta a todos en casa! De postre me inclino por una versión algo más saludable del tiramisú de toda la vida, con pistachos y frambuesas. Le vi la receta por primera vez a Ina Garten. -¿Cómo educas en cuanto a comida a tus hijos?

-Comiendo un poco de todo y mucho de nada. Les introduzco variedad de alimentos y no les fuerzo a comer. La idea es que asocien la comida con experiencias positivas.