«Es el rostro de una madre cansada», ha explicado la supermodelo brasileña

ADRIANA Lima ha sido una de las supermodelos mejor pagadas de la historia, ha colaborado con las firmas más importantes del mundo y ha desfilado en las mejores pasarelas. Desde 1999 hasta 2018 fue uno de los ángeles de Victoria’s Secret, firma para la que ha vuelto a ponerse las alas a sus 42 años, por lo que todas sus apariciones vuelven a copar titulares. Como la última, con motivo del estreno de «Los juegos del hambre: balada de pájaros cantores y serpientes», donde sorprendió a todos con un impactante cambio físico del que todo el mundo habla. Tras escuchar que sus nuevas facciones podrían deberse a un retoque estético que habría afeado su rostro, la propia «top» quiso dar una explicación, aunque también ha sorprendido: «Es el rostro de una madre cansada de una adolescente, dos preadolescentes, un niño activo, un niño de un año que está aprendiendo a caminar y tres perros…», aclaró Adriana, que tiene dos hijas, Valentina y Sienna, de trece y diez años, fruto de su primer matrimonio con el exbaloncestista Marco Jaric, y uno, Cyan, nacido de su relación con Andre Lemmers. Divorciado, el productor de cine ha aportado, a su vez, otros dos hijos a su historia de amor con la modelo brasileña.