EL Palazzo Corsini, una de las joyas arquitectónicas de Florencia, con un importante legado histórico y artístico y que cuenta en su interior con obras de Rubens, Fra Angelico y Caravaggio, se convirtió, hace unos días, en el escenario donde se presentó la nueva colección de alta joyería de Cartier, «Le Voyage Recommencé».

Entre los frescos, las pinturas centenarias y los estucos, además de la belleza de los nuevos diseños y las piedras preciosas, se pudo contemplar a algunas de las mujeres más impresionantes de la pantalla. Monica Bellucci, que a sus 58 años sigue siendo una de las mujeres más deseadas de Hollywood, volvió a impactar a los presentes con su físico de impresión, haciendo que las cabezas se girasen a su paso. La italiana vive un gran momento no solo en el plano personal —junto al cineasta Tim Burton—, también en el profesional, ya que acaba de anunciarse que formará parte del reparto de la segunda parte de «Beetlejuice».

SONRISA DE CONCILIACIÓN

Riley Keough llegó a Florencia con la mejor de sus sonrisas. No en vano, la actriz y nieta de Elvis Presley ha firmado por fin la paz con su abuela Priscilla Presley después de varios meses de batalla legal. Cuatro días después del funeral de su madre, Lisa Marie, cuya trágica muerte sorprendió a todos, en enero pasado, Riley vio cómo los abogados de su abuela presentaban una petición ante un tribunal de Los Ángeles con la que ponían en duda la «autenticidad y validez» del testamento de la única hija del «rey del rock». Priscilla desconfiaba acerca de que su hija los hubiera eliminado a ella y a la persona que le ayuda con los negocios, Barry Siegel, como fideicomisarios del testamento y los hubiera sustituido por sus nietos, Riley y Benjamin Keough, quien se suicidó en 2020, cuando tenía 27 años. Afortunadamente, las dos partes llegaron a un acuerdo de conciliación y todo ha quedado, de momento, en una anécdota más que sumar a la azarosa historia de esta saga de artistas.

Elle Fanning y Vanessa Kirby, embajadoras de la firma, compartieron cena con la aristócrata italiana Bianca Brandolini d’adda y con el actor Adrien Brody, entre otros.

Todos ellos admiraron la nueva colección de más de 80 piezas inéditas y artesanales, que han encontrado inspiración en otras artes, como los trajes de los derviches danzantes o el Islam, cuya arquitectura y esplendor con motivos arabescos se traslada a las joyas en las formas o en los colores.