A pocos meses de cumplirse siete años de su inesperada ruptura, la guerra entre Angelina Jolie y Brad Pitt continúa abierta. Su último enfrentamiento ha sido a causa del Château Miraval, la propiedad que adquirieron en la Provenza (Francia), en 2008, que cuenta con un viñedo de 500 hectáreas. Según la publicación «Page Six», que ha tenido acceso a una serie de documentos legales de Pitt, los dos actores acordaron que nunca venderían el 50 por ciento de su participación en esa propiedad sin la aprobación del otro. Sin embargo, ella terminó vendiendo su participación, en 2021, a un «oligarca ruso», sin el consentimiento de su exmarido. En los documentos que acaban de salir a la luz, el actor califica a su exmujer de «vengativa» por haber «colaborado en secreto» con dicho empresario ruso.