LOS rumores sobre Iñaki Urdangarín y Ainhoa Armentia no dejan de sucederse aunque intentan disfrutar de su amor alejados del foco mediático. Muchos han sido los que los rodean en las últimas semanas, desde que el exmarido de la infanta Cristina y su novia estarían deseando formalizar su relación con una boda a que la pareja estaría esperando su primer hijo en común o la pensión que esta recibiendo el exdeportista de su exmujer o que ha pactado una cantidad por su silencio. Uno a uno estos días la pareja ha ido desmintiendo estos argumentos. Por un lado, ha sido la propia Ainhoa quien ha zanjado el tema del embarazo de forma tajante, a la salida del despacho de Vitoria donde trabaja. Ya lo había desmentido antes, pero los comentarios y especulaciones habían continuado y, preguntada en esta nueva ocasión, ha vuelto a salir al paso de los rumores: «Ya lo dije el otro día, no sé por qué seguís inventando e inventando, todo son mentiras. Ya está bien. No tengo nada más que decir», dijo. Por otro lado, el abogado de Iñaki Urdangarín, Mario Pascual Vives, concedió una entrevista, el pasado martes 14 de marzo, al programa «En boca de todos», de Cuatro, habló sobre la situación del exjugador de balonmano y negó las informaciones aparecidas.

NECESIDADES LABORALES

Como también había recalcado en otros espacios televisivos como «Y ahora Sonsoles», insistió sobre las necesidades laborales de su cliente: «El tema de poder conseguir, por fin, trabajo, es una de sus prioridades. […] Han pasado muchos meses, años, desde que salió de prisión y a día de hoy no ha conseguido un trabajo, pero sigue luchando por poderlo tener. Se ha ido preparando, durante el tiempo que estuvo en prisión hizo cursos que aprobó con buenas notas y entiendo que está preparado para varios sectores que podrían ser en los que podría realizar trabajos». El balonmano es uno de los sectores preferidos porque «lo conoce bien y lo ha seguido siempre de primera mano», aunque «hay otros sectores, como el “coaching” o las telecomunicaciones, áreas que pueden ser destinos que puedan prestarle trabajos». A las preguntas de Diego Losada, presentador del programa, sobre si es cierto que Urdangarín esté cobrando o vaya a cobrar una pensión —se ha llegado a hablar de una indemnización de dos millones de euros y una cifra vitalicia de 25.000 euros al mes— fue tajante: «De cierto, me temo que no hay nada. Todo esto son meras especulaciones. A finales de enero de 2022 se emitió un comunicado público en el que se decía que había un acuerdo de interrumpir la relación conyugal. Desde entonces, se han tenido que tomar decisiones, se ha hablado de la familia, de los hi

jos, del funcionamiento de las vacaciones… durante muchas semanas y meses, que no han quedado incorporados en ningún documento. Yo entiendo que la ciudadanía pueda tener un interés especial en saber o en poder averiguar qué puede pasar, pero estas cifras, hasta donde yo sé, no están encima de la mesa». Según fuentes cercanas, señalaban a ¡HOLA! recientemente: Iñaki, que vive con su madre, Claire Liebaert, cuenta con el apoyo de sus hermanos y tiene una «ayuda familiar» de doña Cristina, quien le cubre los viajes —paga los billetes y las estancias de su todavía marido— cuando este visita a sus hijos, pero en ningún caso está «financiando su vida». En cuanto a la posibilidad de que el acuerdo de divorcio incluya una cláusula de silencio, Mario Pascual Vives recalcaba: «Estoy convencido de que no es así. El señor Urdangarín, si tiene algo que explicar, lo explicará, hasta la fecha me ha tocado a mí, pero no me ha comentado que tenga que explicar o no nada», y añadía: «Creo que la situación actual está rodeada de una serie de personas que puedan tener interés periodístico de esta situación. Lo que es cierto es que, en esta situación, lo primordial es proteger a los hijos». Finalmente, acerca de los rumores de boda entre Iñaki Urdangarín y Ainhoa Armentia, Mario Pascual Vives ha asegurado: «No tengo la más mínima noticia al respecto. Eso sí, me gustaría que me invitaran».

Lo que sí parece claro es que el documento que haga efectivo el divorcio de Iñaki Urdangarín y la infanta Cristina tendrá que esperar a que Irene sea mayor de edad. La más pequeña de la casa celebrará sus dieciocho años el 5 de junio y, a partir de ahí, ya solo quedaría fijar la fecha para disolver el matrimonio. Las mismas fuentes contaban a ¡HOLA! que no tiene que ser esta primavera, ya que, con un verano de por medio, es posible que esperen a septiembre.

«Todos son mentiras», dice tajante Ainhoa sobre los rumores que apuntan a que estaría esperando un hijo «No tengo la más mínima noticia al respecto», asegura Mario Pascual Vives sobre las informaciones de una posible boda de la pareja. «Eso sí, me gustaría que me invitaran»