Sobre la nueva relación de Risto, la «influencer» nos dijo: «Es importante para mí, porque nuestra hija va a estar feliz.

Me alegro de su felicidad y él de la mía»

LOS «influencers» más seguidos en nuestro país se dieron cita, el pasado jueves 8, en los Premios Ídolo. A esta gala, celebrada en Madrid, no faltó Aida Domènech, más conocida como Dulceida, quien, además de ser la «reina de las redes», es la creadora de estos galardones. «De pequeña, mis ídolos eran Britney Spears y Mary-kate Olsen. Ahora no tengo ninguno, pero admiro a Chiara Ferragni desde siempre. Empezamos a la vez y me encanta». Por su parte, Laura Escanes se confesó fan de Rihanna ante ¡HOLA!: «La amo», nos dijo, antes de sincerarse sobre su noviazgo con el cantante Álvaro de Luna y sobre las recientes fotografías de su exmarido, Risto Mejide, con la farmacéutica Natalia Almarcha. —Laura, ¿tu hija tiene algún ídolo?

—Creo que nosotros, sus padres. Con tres años, siendo tan pequeñita, hace todo lo que hace mamá y lo que hace papá… —¿No se revoluciona cuando ve a alguien por la tele?

—Con «Peppa Pig», de repente —ríe—. —¿Te gustaría que fuera «influencer»?

—No, pero qué le iba a decir si me ha visto en las redes… —¿Cómo definirías tu momento actual?

—Diría que estoy en mi mejor momento. Yo proyecto siempre para arriba. Es verdad que este año han pasado cosas maravillosas. —¿Cómo has logrado superar el bache?

—Aunque, personalmente, fue un año complicado, lo profesional me impulsaba a seguir

adelante, Tener un buen a mejorar momento y aprender. profesional ayuda a estar bien, claro. —¿Ahora vives el amor de una —Todo manera nos distinta? hace aprender. Sería estúpido decir que no. —¿Qué destacarías de Álvaro, tu chico?

—La pasión con la que hace las cosas. Es maravilloso verle disfrutar y currárselo tanto.

—Se ha hablado mucho de ti cuando empezaste a tener pareja, pero no tanto de Risto ahora que acaban de fotografiarlo con una mujer. ¿Crees que se pone más el foco en una mujer?

—No lo sé… Tampoco depende de mí. Cuando pasan estas cosas que no puedo gestionar, intento que no invadan mi cabeza. Cuanta más paz y estabilidad tenga, mejor. —Aun así, te alegrará que tu exmarido tenga pareja.

—Evidentemente. Si él es feliz… —¿Te ha sorprendido la noticia?

—Es importante para mí, porque Roma va a estar feliz. Evidentemente, me alegro de su felicidad y él se alegra de la mía. Los caminos se separan, pero no le deseo nada malo. Por favor, es el padre de mi hija.

—Aunque no lo creías en un principio, has terminado reconociendo que la diferencia de edad terminó siendo un problema.

—Sí. Lo que he dicho es que lo que nos une con otras personas es el momento vital, porque coincides en «hobbies» y lo que sea... Eso te hace conectar más. Sí, supongo que es importante.